Tres estrategias de seguridad que impulsarán la productividad de los empleados
La seguridad y la productividad son dos áreas prioritarias para cualquier líder empresarial. Dadas las tendencias actuales en materia de ciberseguridad y trabajo a distancia, las empresas quieren ofrecer el acceso a las funcionalidades que el personal digital necesita, con un impacto mínimo en su experiencia y un riesgo mínimo.
En la búsqueda de un buen equilibrio entre la seguridad de los datos y la productividad,
¿es suficiente contar con un programa de formación sobre ciberseguridad? Algunos incluso lo consideran un reto.
Pero ¿qué pasaría si nos planteáramos invertir en tecnologías que aborden la seguridad y la eficiencia operativa al mismo tiempo? En una encuesta reciente realizada a más de 300 líderes tecnológicos, los encuestados clasificaron la ciberseguridad como la mayor prioridad para el gasto en TI en 2022.
A continuación, encontrarás tres estrategias que pueden ayudar a las empresas a darle un impulso a la productividad sin afectar a la tolerancia al riesgo.
Automatización
La automatización de los sistemas y las aplicaciones es lo que permite que el personal pueda seguir trabajando en una infraestructura híbrida. Además, permite eliminar tareas repetitivas
y simplificar las operaciones diarias. Por ejemplo, las herramientas automatizadas de exploración de vulnerabilidades pueden gestionar los riesgos potenciales que pueden producirse de forma natural al utilizar sistemas operativos y aplicaciones de terceros.
Supervisión continua
Una de las áreas donde es probable que las medidas de seguridad afecten negativamente
a la productividad es la política de acceso remoto. Y dadas las tendencias laborales de la actualidad, esto no puede ocurrir. Con una supervisión continua, el análisis de la seguridad
y el comportamiento de los usuarios puede ser de ayuda para evaluar los riesgos potenciales
y activar una respuesta cuando sea necesario.
Protección centrada en la identidad
Las personas representan el punto de vulnerabilidad más importante en toda organización. Educar a los usuarios para que sean conscientes de las amenazas y mejoren sus contraseñas
es una obviedad, pero confiar únicamente en la aplicación sistemática de las prácticas recomendadas no es una buena inversión. Implementar una seguridad centrada en la identidad es fundamental para evitar la pérdida de datos y proteger el acceso de los usuarios. La solución más sencilla para ello es la autenticación multifactor.
Estas estrategias aúnan tres elementos clave de cualquier organización: la tecnología (automatización), los procesos (supervisión continua) y las personas (seguridad de la identidad). ¿El objetivo final? Motivar a los responsables de la toma de decisiones a que adopten un enfoque proactivo para el uso de tecnologías que modernicen las operaciones y mejoren la experiencia de trabajo de los empleados.
Si te ha gustado este post y te ha hecho reflexionar sobre la planificación del gasto en TI,
echa un vistazo a esta lista de comprobación inteligente.